Cómo influir positivamente sobre grupos de personas
La radiónica, como metodología de desarrollo personal, nos ofrece posibilidades de acción sorprendentes. Una de las más llamativas es la oportunidad para establecer pautas positivas en otras personas. Generalmente esto se encuadra en el ámbito de la terapia. Con radiónica se puede ayudar a otros a mejorar su bienestar sin necesidad de que la persona sea consciente de que actuamos sobre ella. El efecto placebo no puede darse en estos casos y, sin embargo, los resultados son comprobables en la práctica.
También podemos incidir en asuntos diversos relacionados con el desarrollo personal, actitudes y aptitudes. Trabajando a niveles vibratorios, la teoría radiónica afirma que es posible establecer “semillas” de progreso que permitan que la persona destinataria disponga de oportunidades de avance en áreas deficitarias. Estas “semillas” darán su fruto de forma más o menos rápida dependiendo de las circunstancias y siempre que no haya un deterioro cognitivo u orgánico insalvable.
Muchos preguntan si estas acciones positivas sobre otros se pueden realizar también sobre colectivos. Es decir, si podemos influir sobre grupos de la misma forma que se hace a nivel individual. La respuesta es afirmativa. Muchos operadores de dispositivos radiónicos bien configurados, los utilizan para mejorar las capacidades, actitudes y aptitudes de equipos de trabajo, componentes de equipos deportivos o miembros de determinados colectivos. Se puede incidir sobre la cohesión de los grupos, las posibilidades de actuación conjunta o el interés por conseguir determinadas metas. Muchos terapeutas trabajan el bienestar de un conjunto de pacientes en determinadas áreas, sean a nivel físico o mental, con resultados muy llamativos. Cuando se trabaja con grupos valen las mismas premisas que cuando se trabaja a nivel individual. Es importante incidir sobre las ventajas que los grupos obtendrán al seguir determinado proceder. Esto resulta importante cuando se trabaja con grupos de clientes a nivel empresarial.
No dejaremos de resaltar que, cuando se trabaja con distintas personas al mismo tiempo, la teoría radiónica señala que un aporte energético mayor incidirá en resultados superiores. Esto se solventa con la utilización de energía orgón modulada por el dispositivo que estemos utilizando. Radiónica y energía orgón forman un tándem que optimiza resultados y facilita la consecución de los objetivos buscados. Tenga esto presente al elegir su dispositivo radiónico.
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