El entrelazamiento cuántico y la radiónica
Muchos detractores de la radiónica dicen que usar una muestra para equilibrar energéticamente a distancia a una persona, animal, planta o ser vivo es algo irrazonable. Sin embargo, cada vez más evidencias científicas apoyan la idea de las conexiones que se establecen a niveles de partículas de materia, permitiendo interactuar unas sobre otras. La unión vibratoria se llama “entrelazamiento cuántico”. El investigador y físico de origen danés Niels Bohr, ha descubierto que las partículas subatómicas como los electrones y fotones, una vez que entran en contacto, pueden seguir influenciándose de forma instantánea y a distancia, sin ningún nexo aparente de unión.
Otro científico, Alain Aspect y su equipo, emplearon fotones para mostrar que cuando se actuaba sobre una de dos partículas enlazadas, la medición de un fotón afectaba al segundo fotón, en una especia de comunicación inmediata sobre ambos. Este y otros muchos experimentos aparecen en el libro “El experimento de la intención” de Lynne Mctaggart.
El médico e investigador Albert Abrams, descubridor e iniciador de la Radiónica (tachado de charlatán y embaucador por sus detractores), ya demostró cómo se podían obtener mediciones energéticas del conjunto de un organismo (o de elementos del mismo) simplemente con una muestra de saliva. También que se podía actuar sobre el todo empleando una parte (incluso una representación de la parte). Esta llamativa posibilidad es la que sirve de base para interactuar y equilibrar, además de potenciar, con un aparato radiónico.
Cuando observamos los cambios positivos y constructivos que acontecen sobre la base energética de un ser vivo, nos damos cuenta del enorme potencial al que podemos acceder a través de un dispositivo radiónico bien configurado (por ejemplo, el ARE X3 Pro).
Esta es la razón por la que siempre sugerimos realizar experiencias básicas de mejora y actuación sobre plantas o animales, para que cualquier operador de radiónica incremente su confianza y seguridad sobre la efectividad de este sistema de desarrollo personal e influencia positiva sobre el entorno. La radiónica no es una panacea universal. Es una herramienta valiosa que nos ayuda a acercarnos a lo que perseguimos y a la posibilidad de sacar lo mejor de cualquier situación.
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