Mundo virtual y radiónica
La radiónica, como teoría de desarrollo personal e interacción con el entorno, mantiene entre sus postulados ideas que parecen coincidir con las investigaciones más avanzadas en física de partículas y también en relación con lo que consideramos realidad. Por ejemplo, la idea de que no somos meros espectadores de nuestra existencia es básica en la radiónica. Podemos interactuar con la energía de la que formamos parte de manera que contribuimos a construir lo que llamamos realidad.
Nuestra mente y nuestro cuerpo son moldeados por nuestro entorno de forma general, pero si tomamos consciencia de lo que somos y de nuestras capacidades, podemos interactuar con las vibraciones que conforman el todo, alterando nuestra existencia más probable. Esto implica que podemos ser cocreadores de lo que nos ocurre y de cómo vivimos. Cuando nuestra conciencia se libera de las creencias limitantes podemos percibir que tenemos mucho más poder del que creemos. Y lo mejor de todo es que podemos ejercer ese poder a voluntad.
Nuestra mente puede moldear nuestra existencia y adecuarla a nuestras necesidades y deseos dentro de las posibilidades físicas del mundo en que nos desarrollamos. Los seres humanos podemos actuar como “constructos” si así lo decidimos y actuamos en consecuencia. Podemos influir también unos sobre otros y modelar procesos de beneficio mutuo.
Hace poco, una nueva hipótesis científica cada vez más compartida es que la realidad experimentada por los humanos sería parecida a una simulación artificial avanzada, una especie de “Matrix”. Esta teoría difundida por un físico de la Universidad de Portsmouth (Dr. Melvin Vopson) es defendida por algunos famosos como Elon Musk. La idea coincide con la radiónica en múltiples ámbitos como en el aspecto de que la base de todo el Universo está conformada por conjuntos de información que son utilizados como “ladrillos” que conforman todo lo que percibimos. Estos “ladrillos” forman unidades mayores, generalmente equilibradas. En radiónica se suelen llamar códigos de información intrínseca, un ejemplo de los cuales son los ratios radiónicos. Codificaciones alfanuméricas que encierran ideas, procesos, significados o intenciones.
Cuando ocurren alteraciones por causas diversas, lo que llamamos realidad puede desequilibrarse. Es posible recuperar el equilibrio a través de nuestra mente y también a través de herramientas ideadas para que nuestra mente ejerza su influencia en la realidad que nos rodea (un ejemplo, a nivel energético, serían los aparatos radiónicos auténticos y bien configurados).
¿Dónde nos lleva todo esto? Sencillamente a que lo que llamamos “Radiónica” encierra mucho más que la simple idea de “utilizar aparatos para conseguir cosas”. La radiónica tiene una base teórica que entronca profundamente con las ideas más avanzadas sobre la formación de la realidad y nuestro papel como seres conscientes. Por tanto, ¿Se conforma usted con vivir el lugar que le ha tocado y las circunstancias que conlleva? ¿O prefiere elaborar su propia realidad a través de las herramientas adecuadas?
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