Nikola Tesla y la frecuencia del estado de fluir
En 1931 un investigador llamado Winfried Otto Schumann llevó a cabo un profundo estudio matemático. Las complejas pruebas concluyeron con el hallazgo de una resonancia magnética que existía entre la ionosfera y la superficie terrestre. Años más tarde, otro investigador llamado Herber Koning estableció que 7,83 Hertzios era la medida óptima de esa frecuencia. Por otra parte, Nikola Tesla ya tenía nociones de esta resonancia con anterioridad a estos hallazgos. En realidad, hablamos de un rango de resonancias comprendida entre los 7,5 y los 13 Hertzios. Para Tesla, el punto óptimo de esta resonancia era 10,00 Hertzios.
Lo interesante es que el cerebro humano, como el de todos los mamíferos, se ve influido por esas frecuencias. Ambas son benéficas. Se ha comprobado como la frecuencia de 10 Hertzios es la predominante cuando una persona se encuentra en estado de fluir. Ese estado de fluir o flujo fue acuñado por el conocido psicólogo y catedrático Mihály Csikszentmihályi. Tiene que ver con un estado emocional positivo caracterizado por una implicación completa en una actividad concreta. Dicho de otra forma, es el estado que las personas podemos alcanzar cuando estamos haciendo algo que nos gusta y que además dominamos de alguna manera. Para unos será la realización de una ocupación o trabajo. Para otros, la ejecución correcta de una determinada actividad deportiva de su agrado. También ocurre cuando una persona disfruta de la elaboración de un procedimiento artístico.
Cuando se logra este estado de fluir, el tiempo pasa a un segundo plano. Pueden pasar horas sin que aparezca cansancio o fatiga. La persona se siente plena, completa, equilibrada. Hay una perfecta sincronía entre la acción y el pensamiento. En este estado, la sensación es de total control y gran satisfacción. La actividad que se lleva a cabo se realiza perfectamente, como si fluyera armónicamente sin dificultad. Generalmente es en ese estado ideal donde se han realizado las mayores proezas del pensamiento y la actividad humanas. Desde sublime creación artística hasta complejas formulaciones matemáticas. Desde proezas deportivas hasta decisiones sociales y personales de gran trascendencia.
La frecuencia de 7,83 Hertzios influye muy positivamente sobre procesos hormonales y cerebrales como la concentración, también para recuperación física o mental. La frecuencia de 10 Hertzios se utiliza para todos los procesos de armonización cuerpo mente, toma de decisiones y meditación entre otros. Ambas frecuencias extraen lo mejor de una persona y facilitan la consecución de objetivos.
Con radiónica podemos utilizar estas frecuencias y otras muchas altamente recomendables para potenciar los procesos terapéuticos que hayamos programado. También para mejorar las posibilidades de alcanzar metas que requieren estados físicos y mentales óptimos.
El dispositivo radiónico ARE X3 Pro incorpora un extraordinario generador de orgón que además puede programarse para emitir en las frecuencias de 7,83 Hertzios y 10 Hertzios. También dispone de otras frecuencias fijas de gran interés y la posibilidad de utilizar frecuencias manuales que el operador del equipo considere importantes en su caso. Está pensado para que sea muy fácil de utilizar. Considere esta ventaja a la hora de adquirir un aparato completo y multifacético de radiónica. Los resultados pueden ser realmente sorprendentes empleando estas opciones.
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