Peligros en las radiaciones electromagnéticas que nos rodean
La resolución 1815 de la OMS (Organización Mundial de la Salud) advierte de los peligros potenciales de los campos electromagnéticos y sus efectos en el medio ambiente. La gran mayoría de expertos independientes a nivel mundial consideran que hay motivos para la preocupación y exigen una mayor transparencia en este sentido para concienciar a la población. Sin embargo, en aras del progreso (y sobre todo de los intereses económicos) se sigue ocultando, por parte de la industria, los efectos nocivos que puede haber en la exposición continuada a este tipo de radiaciones a través de móviles, antenas y aparatos domésticos de diverso tipo.
Según numerosos estudios, las radiaciones magnéticas pueden afectar a los seres vivos bastante por debajo de las directrices internacionales consideradas seguras. Esto puede llevar a un incremento de los radicales libres, aumento de los casos de cáncer, afectación del sistema reproductor, problemas neurológicos y efectos negativos generales en los seres humanos.
Es tanta la prevalencia de los dispositivos que pueden afectarnos, que resulta difícil en el mundo moderno aislarse para evitar los posibles efectos adversos de los, cada vez más presentes aparatos emisores-receptores. Pronto, también estará disponible la tecnología 5G que incrementará aun más todo el abanico de conexiones potentes.
Si queremos mantener la salud debemos ser conscientes de esto y poner los medios para, como mínimo, contrarrestar lo efectos adversos de cualquier tecnología que pueda incidir sobre nuestro organismo.
Utilizando la radiónica se comprueba como unos de los procedimientos básicos para equilibrar a cualquier persona tiene que ver con la descontaminación electromagnética. El correcto balance eléctrico del organismo también es muy importante. Caminar con los pies desnudos sobre el suelo o la hierba es una opción al alcance de todos para descargar la electricidad estática por ejemplo y permitir la conexión con la tierra. Es común que esta simple acción elimine desde dolores de cabeza a indisposición general de origen desconocido.
Con un buen aparato de radiónica bastan 5 minutos para equilibrar a una persona en relación con los desajustes vibratorios relacionados con la exposición excesiva a fuentes disruptivas. Esta sencilla actuación permite observar una mejora casi inmediata en desarreglos y malestar que no proceden de otra fuente.
Mantener un buen equilibrio energético es la mejor opción para evitar el comienzo de patologías importantes. Además, nos permite disfrutar de una sensación de claridad mental y bienestar necesarios para sacar mayor partido a nuestras actividades diarias.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.