Radiónica, muestras y conexión
La teoría radiónica explica que es posible enlazar energéticamente con un ser vivo a través de una muestra relacionada con ese ser vivo.
En los inicios de la radiónica se empleaba como muestra algún fluido corporal (saliva o sangre), pero más tarde se comprobó que era posible emplear también radiografías, fotografías o simples porciones pequeñas de cabello para establecer una “conexión vibratoria” efectiva. ¿Qué podemos hacer a través de esa conexión?
Se puede disponer de información energética. Es decir, medimos niveles no físicos sino vibratorios ¿Cómo se encuentra a nivel de funcionamiento orgánico general? ¿Cómo está la vitalidad de un determinado sistema corporal? ¿Qué tal el corazón? ¿Cómo se encuentra su estómago? ¿Qué hay de los otros órganos o sistemas?
También se pueden establecer relaciones entre desequilibrios y posibles elementos correctores. ¿Hay reacción positiva a un determinado remedio? ¿Qué mejoría se aprecia aplicando un nutriente específico? ¿Conviene emplear una homeopatía concreta? ¿Tal vez un alimento en especial? ¿Se puede aplicar sólo radiónica?
Con la misma idea, también es posible establecer si un determinado alimento o incluso remedio resulta negativo para una persona determinada. Las posibilidades de utilización de una muestra con un buen dispositivo radiónico son muy amplias.
Para explicar por qué una simple muestra puede reflejar el estado de una persona a distintos niveles, consideraremos el concepto de “holograma”. Un holograma consiste en una imagen en tres dimensiones de un objeto o persona que ha sido captada mediante rayos láser. Al cortar una parte del holograma y colocarla frente a un rayo láser, se puede observar el objeto al completo que aparecía en el holograma original. Cada parte contiene la información del todo. De la misma forma, una muestra de un ser vivo puede considerarse una especie de “fragmento holográfico”. Mediante este fragmento se puede acceder a toda la información vibratoria que conforma el sustrato físico.
En radiónica y en relación a los seres vivos, se busca actuar sobre la muestra para obtener también respuesta en el organismo completo. La teoría radiónica basada en la física cuántica explica que hay una interconexión entre el ente biológico y las muestras del mismo.
No cabe duda de que todo esto implica enormes posibilidades de actuación y de mejora tanto a nivel de terapia alternativa como en el campo del desarrollo personal. La experimentación individual es la mejor manera de sacar el máximo provecho de todo esto.
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